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| Créditos: Santiago matamoro |
Hoy queremos compartir con nuestros lectores un recorrido maravilloso para realizar en el oeste de Catamarca, donde se pueden ver edificios históricos que incluyen capillas, iglesias y bellos pueblitos, todos ellos hechos de adobe.
El recorrido de la Ruta del Adobe consta de cincuenta kilómetros, a lo largo de la Ruta Nacional N° 60, que en este tramo une las localidades de Tinogasta y Fiambalá.
Qué ver en la Ruta del Adobe en Catamarca
La primer parada en el recorrido por la Ruta del Adobe es Casagrande, en Tinogasta. Se trata de una antigua casona, de altísimos techos, que otrora fue propiedad del vicecónsul de Chile en la provincia. En la actualidad, Casagrande funciona como alojamiento turístico. Así, los visitantes pueden disfrutar de un fresco respiro al interior de esta construcción de adobe, que los pone a reparo del arduo calor exterior del verano. El encanto de Casagrande deriva, también, de su mobiliario antiguo, todo el heredado del siglo XIX.
La segunda parada en esta ruta es El Puesto y el oratorio de los Orquera. El Puesto es un pequeño poblado, inserto en un mar de viñas y olivos, ambos cultivos muy importante de la provincia de Catamarca. Allí construyeron los Orquera, una tradicional familia poseedora de tierras, un pequeño oratorio a mediados del siglo XVIII.
Siguiendo por la Ruta del Adobe, el próximo destino es el pequeño pueblito de Anillaco. Allí se puede visitar la Residencia y Mayorazgo, que data de principios del siglo XVIII y cumplió un importante rol en el dominio español sobre una zona en la que la resistencia indígena había perdurado a lo largo del siglo XVII en las llamadas Guerras Calchaquíes.
En Anillaco también se puede visitar la Iglesia de Nuestra Señora del Rosario y la Capilla de Anillaco, que destaca por sus antiguas imágenes y su altar realizado en barro.
La siguiente estación en la Ruta del Adobe es el pueblo de Watungasta o Batungasta. Se trata de un sitio arqueológico que conserva los vestigios de un pueblo o parcialidad perteneciente a la tribu de los diaguitas. Se pueden observar allí, a orillas del río La Troya, los restos de pucarás, edificios militares con los que estas tribus protegían sus poblados y habitantes.
El siguiente paso es arribar a la localidad de Fiambalá, famosa por sus aguas termales. Allí se puede visitar la Iglesia de San Pedro, construida en 1770, que conserva imágenes de producción peruana en su altar. El otro destino de la Ruta del Adobe en Fiambalá es la Comandancia de Armas, también construida en el siglo XVIII.
La Ruta del Adobe: patrimonio histórico cultural
Recientemente, la legislatura de Catamarca otorgó reconocimiento oficial a la Ruta del Adobe como patrimonio histórico cultural provincial. Un sitio que sin duda conserva en sus edificaciones un trozo de la historial colonial catamarqueña y argentina.
Invitamos a quienes visiten la provincia de Catamarca a realizar este bello recorrido por la Ruta del Adobe.
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